Compartimos un artículo publicado ayer domingo 4 de diciembre en el diario «El País», titulado: “La genética es la base para tener vacas funcionales y rentables”.
«Juan Ignacio Mangado, es el nuevo presidente de la Sociedad Criadores Holando, la raza que siempre amó y le defendió los tambos, aún en los peores momentos. Hincha de la genética, sostiene que para mejorar en la lechería “el productor tiene que registrar sus vacas. Si no se sabe cuál es la mejor, sin registros y sin hacer control lechero, difícilmente se pueda progresar”, afirmó. Una herramienta fundamental a impulsar más es el genotipado que se hace en Estados Unidos, el que posteriormente se suma a la Evaluación Nacional racial.
Su familia llegó a San Gregorio de Carro, al norte del Departamento de San José y límite con Flores en la década del 40, pero su antecedente se remonta a 1850 en los pagos, para dedicarse a la lechería y la producción agropecuaria. Hoy, con orgullo dice que pertenece a la quinta generación familiar de productores agropecuarios. Juan Ignacio Mangado, nuevo presidente de la Sociedad Criadores Holando del Uruguay es un apasionado por la lechería, llegó a manejar dos tambos y le dedicó al sector 43 de sus actuales 68 años de vida, pero también es productor ganadero. Crió Holando toda su vida, maneja ganado SH (no tiene pedigree) y es un férreo defensor de los registros y el Control Lechero, porque permite identificar las vacas que defienden al tambo, con animales longevos, con datos y muy productivos. “Siempre hice Control Lechero desde que se fundó y registré el ganado. Hoy tengo cantidad de vientres que son la 14 y 15 generación de ganado registrado”, dice con orgullo, porque según su visión, “el mayor avance de la lechería pasa por la genética”.
-¿Cómo ve hoy a la lechería uruguaya?
-El sector tuvo un buen año desde el punto de vista del precio de la leche, pero los costos están incidiendo muchísimo en la rentabilidad del productor. Con las perspectivas de sequía que hay, se está plantando en muchos lugares, pero para adelante hay un signo de interrogación. Obviamente el mercado internacional tuvo un récord este año pero los precios comenzaron a bajar. Ya hay algunas dificultades, no en la colocación, pero sí hay señales que no son tan auspiciosas como las que veníamos teniendo. En un sector exportador que manda el 70% de su leche hacia el exterior, la baja del precio del dólar también significa otra señal de alerta. Más allá de todo eso, la lechería va a seguir teniendo un papel importante en la economía del Uruguay y en la agropecuaria nacional, más allá de los avatares a los que los productores estamos muy acostumbrados.
-Desde su punto de vista ¿cuál es el mayor desafío que tiene el sector?.
-El principal es seguir creciendo. Estamos convencidos de que hay que crecer en genética. Es muy lento el avance pero es constante y acumulativo. Se pueden tener más vacas por hectáreas, se están haciendo un montón de ensayos, encierros, camas calientes y otras tecnologías, pero si no se avanza genéticamente el techo está muy cerca. En vacas por hectárea hay un tope, en el encierro también y desde mi punto de vista, donde se debe seguir desarrollando la lechería es avanzando en genética. La mejora que vas teniendo de tus terneras la vas acumulando y proyectando hacia adelante.
-¿Cómo está hoy la raza Holando?
-La veo muy bien. En estos últimos años hemos tenido un aumento de la Selección Holando (ganado SH). El registro de SH es un reflejo de cómo ven los productores el sector. Hay más productores que están registrando sus terreras y se ven socios nuevos. Hay algunas señales positivas y una de ellas es que los socios de la gremial y la gente de fuera, está viendo que la registración del ganado es sumamente importante. Todo lo que es la Comisión de Evaluación Genética donde la Sociedad participa con Mejoramiento y Control Lechero Uruguayo, con la Asociación Rural del Uruguay, Instituto Nacional de la Leche, Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria y Facultad de Agronomía, es sumamente importante. a su vez, todo lo que se está haciendo con el índice Económico Productivo son señales claras de que la lechería y sobre todo la Sociedad Criadores Holando del Uruguay, va avanzando a mejorar los servicios que se están brindando al productor. Veo que vamos en buen camino y está impronta de buen relacionamiento con todas las instituciones viene desde hace unos cuantos años.
-¿Qué representa presidir la Sociedad Criadores Holando del Uruguay?
-Es un gran honor. Desde el primer día que comenzamos con la lechería nos hicimos socios de la Sociedad, estamos registrando nuestros ganados. Hoy ya tenemos cantidad de terneras que son la 14 y 15 generación con registros, todo nuestro ganado está registrado. Los socios nos dieron el altísimo honor de presidir la Sociedad. Hace 3 años que la estamos integrando y tuvimos un pasaje por ella siendo más jóvenes. Los socios entendieron que hay que darle una continuidad a la gestión de Martín Gurgitano (presidente saliente), que para nosotros fue muy buena y con muchos logros. Aceptamos el cargo confiados en que hay un grupo humano importante, al igual que los funcionarios, con un equipo de gente de campo muy capacitada y con la camiseta puesta. El desafío lo vamos a llevar adelante en equipo y vamos a continuar trabajando por la mejora de la raza.
-¿Cuáles serán las metas?
-Hicimos una evaluación de los logros del trabajo de Marín Gurgitano y con los demás integrantes de la Comisión Directiva nos trazamos seguir trabajando en tres o cuatro cosas que consideramos importantes. Una de ellas es el servicio de genotipado que se lanzó hace dos años. Ese es un servicio importante para los socios de la gremial.
-¿Qué permite esta herramienta?
-Permite conocer la precisión de la ternera desde que está en la estaca (destetada). Se saben características de salud, que es lo que se está buscando a nivel mundial, de leche, de sólidos. Esa evaluación se hace en Estados Unidos, hacia donde se mandan las muestras de ADN y se analizan una cantidad de rasgos de la ternera. Esos datos apoyan la Evaluación Nacional. Ya hemos tenido una participación importante de todos los productores y ahora se está por enviar una segunda muestra. Siempre digo que el productor debe tener vacas funcionales y rentables y para eso la primer herramienta es la genética.
-¿El productor está apostando más a la genética?
-Por tercer año consecutivo hemos tenido en este año un crecimiento en la registración de SH. Con todo lo que hizo la Sociedad, la registración pasó a ser importante dentro del esquema de trabajo del productor lechero. Para mejorar hay que registrar y si no se sabe cuál es la mejor vaca, sin no registra y no hace control lechero, el productor difícilmente pueda mejorar.
-¿Qué otro camino se continuará?
-Todo el trabajo en silencio que hacen los calificadores de la Sociedad al enseñar en las escuelas agrarías todo lo que es la calificación lineal, donde se marcan los rasgos defectuosos de una vaca y los potentes que tiene para mejorarlos genéticamente. Eso repercute en la vida y la cantidad de leche que produce el animal. Nosotros no podemos tener una vaca de muchas lactancias si su ubre no está bien prendida. Hace un tiempo más que se están dando charlas en las escuelas agrarias, con participación activa de estudiantes. Eso se empezó a hacer de nuevo en forma presencial. Esa es una docencia importante y vamos a continuarla.
-¿Qué más?
-Continuaremos impulsando el concurso de dibujos, donde participa tanto el hijo del productor como el hijo del tambero que ordeña las vacas, en una conjunción social que tuvo una enorme repercusión. Cada vez hay más participantes y pueden concursar niños de hasta 15 años con sus creaciones. Con esos dibujos se hacen almanaques y los niños lo reciben. Nos parece un trabajo muy lindo para la promoción de la raza.
-Otra innovación fueron las juras a corral ¿se van a continuar?
– En estas juras virtuales participaron muchos productores que no son cabañeros, participan con su SH porque no se precisa ganado de pedigree. El productor tiene un relacionamiento más cercana con la Sociedad de Criadores Holando del Uruguay y es una oportunidad para brindarles a todos los productores la posibilidad de mostrar su trabajo.
El orgullo de producir SH y mostrar la raza Holando
-El tambero está orgulloso de su trabajo y lleva en la sangre la lechería. ¿Qué receptividad tuvo la idea de los carteles que muestran que en ese establecimiento se registra el ganado y se trabaja con Holando?
-Fue excelente la idea de hacer carteles de SH. El productor que hace SH tiene el cartel con el logo de Holando en la portera de su establecimento. Van más de 100 socios que pidieron que su cartel estuviera en la portera. Es un orgullo tener ese cartel. Es importante como difusión de la raza y como difusión de toda la mejora que estamos teniendo.
-La figura del presentador juvenil fue una gran innovación del Holando Uruguayo. ¿Se continuará impulsándola a lo largo de estos próximos años?.
– Es muy importante para la promoción de la raza y seguiremos incentivando esa figura del presentador juvenil, que tuvo un arranque hace dos años. La ventaja es que permite que los hijos de los productores o los hijos de los tamberos tengan su campeonato anual, que paseen vacas en la pista. Permite comenzar a ver el Holando como una parte de su vida.
-¿Qué otras cosas están entre las prioridades de la nueva Comisión Directiva?
– También está todo el apoyo a las exposiciones. En abril, en el marco de Expo Melilla, junto con la Asociación Rural del Uruguay (ARU) se realizará la Primera Exposición de Hembras Jóvenes, luego viene la Mercoláctea con su 78 exposición. Esta muestra se hará los primeros días de junio, le seguirá la participación del Holando en el marco de la Expo Prado. A nivel de exposiciones del interior, es muy importante la Exposición en San José que se hace junto con la Asociación Rural de San José y luego Expo Cardal. A todas esas se agregará la segunda copa Holstein, con 7 países. En 2023 vamos a organizar la tercera edición y queremos que se incorporen más países. Ese ha sido un evento internacional que prestigia a Uruguay y al Holando y tuvo una gran repercusión. El premio que se obtiene se destina a las instituciones que uno quiera. En caso de Uruguay se destina a las Escuelas Agrarias, que son un pilar fundamental dentro de la educación y formación.»